En desarrollo del Plan Choque, las autoridades capturaron por orden judicial a dos presuntos integrantes de las subestructuras criminales Juan de Dios Úsuga (Clan del Golfo) y Virgilio Peralta Arenas (Caparros), que delinquen en el Bajo Sinú y Sur de Córdoba.
El operativo se dio gracias a las labores de inteligencia de los uniformados, las cuales duraron 8 meses y permitieron que la Fiscalía emitiera las órdenes de captura por el delito de Extorsión agravada y concierto para delinquir agravado.
La primera captura tuvo lugar en el sector Puerto Platanito de la ciudad de Montería, donde fue detenido Armando Soto Sibaja, alias ‘El Negro’, presunto desmovilizado del bloque Norte de las extintas A.U.C. y actual integrante de la subestructura Zulay Guerra del Clan del Golfo.
De ‘El Negro’ se estableció que se desempeñaría como segundo cabecilla de esta organización criminal en el municipio de Valencia y estaría vinculado a la ejecución de homicidios y desplazamiento forzado en la Margen Izquierda de del rio Sinú.
En otro hecho similar, esta vez llevado a cabo en el barrio Cerro Matoso, zona urbana de Montelíbano, se logró la captura de Jorge Córdoba Caldera, alias ‘El Gordo’, quien se dedicaría al cobro de extorsiones en los municipios de Ayapel, Caucasia y Montelíbano. Estaba siendo solicitado por una Fiscalía del municipio de Caucasia.
Según los investigadores, a los sujetos en mención se les atribuye la comisión de extorsiones al sector comercio y ganadero, realizando exigencias que oscilaban entre 200 mil pesos y hasta 50 millones, dependiendo de la capacidad económica de las víctimas.
Además, lograrían recaudar hasta 500 millones de pesos mensualmente, convirtiéndose en un negocio rentable para la economía criminal de esta organización ilegal al servicio del Clan del Golfo.
En los procedimientos de capturas se logró la incautación de tres celulares, los cuales eran utilizados para el cobro de extorsiones e informar los desplazamientos de la fuerza pública.
Finalmente, alias ‘El Negro’ y ‘El Gordo’, junto con los elementos incautados, fueron dejados a disposición de la autoridad competente, después de audiencia un juez les determinó medida privativa de la libertad en el centro carcelario de la ciudad de Montería.