¿Arrepentido? “Me equivoqué, no debí trabajar en Colón”: Julio Comesaña

¿Arrepentido? “Me equivoqué, no debí trabajar en Colón”: Julio Comesaña

El estratega colombo-uruguayo Julio Avelino Comesaña, quien se coronó campeón con Junior de Barranquilla en el Campeonato Clausura 2018 y posterior a la obtención del título se marchó a Argentina para sentarse en el banquillo de Colón de Santa Fe, donde no duró mucho y salió, habló de su salida del club ‘gaucho’.

Comesaña, en dialogo con la emisora argentina Súper Deportivo Radio, contó detalles de lo que fue su salida del elenco barranquillero al Colón, “cuando uno toma decisiones, sabe lo que está haciendo y siempre pensando de la mejor manera. La experiencia fue buena, no me arrepiento de nada. Pero los resultados no se dieron y las conclusiones se deben hacer ahora. Para ir a Colón, mostré un deseo muy gran, porque el dinero lo tenía en Barranquilla con dos torneos a disputar”, señaló.

Con respecto al entorno en el cuadro zabalero, el entrenador de 71 años manifestó, “me ha tocado momentos difíciles en Junior, que es mi casa. Pero siempre los he sobrellevado y apostábamos a algo que lo habíamos analizado. Se estaban haciendo cambios y sabemos que cuando toca cambiar hábitos, la gente se resiste. Y no todas las personas tienen la paciencia para eso. Cometí errores, quizás no debí iniciar ni a trabajar con las condiciones en las que estaba en club”

Asimismo, el experimentado timonel indicó que tras su salida del conjunto argentino tuvo un descanso, o el llamado respiro, sin embargo, asegura que los que se quedan, son los que deben hablar.

“Los que se debería ir, siguen ahí, ellos tienen que hablar. Puedes traer a los jugadores y técnicos que quieran, pero si no cambia desde arriba, no va a cambiar nada”, dijo Comesaña, mostrando su descontento con lo que, al parecer, es una diferencia con las directivas.

Finalmente, el técnico que le entregó la octava estrella a Junior se refirió al grupo de jugadores que tuvo en Colón, unos por pedido de él, otros aparecieron de la nada, “cuando a los jugadores les dicen que yo los voy a mirar, pero a su vez comienzan a llegar jugadores de la nada, suponiendo que sí los traen es para jugar. Eso crea malestar en el plantel, genera desconfianza y los jugadores no son tontos”, concluyó.