En las manos de la actual gobernadora encargada del departamento de Córdoba, Sandra Devia, está acabar con 10 años de desidia administrativa que mantiene a los habitantes de todo el municipio de San Carlos en estado de “Coma” precisamente porque el Camu y los puestos de salud de sus corregimientos, literalmente no cuentan con recursos económicos para su funcionamiento, y todo debido a que el Hospital Sandiego de Cereté que maneja los recursos percápita no los está administrando bien.
Son por lo menos entre 280 y 350 millones de pesos que llegan mensualmente del Sistema General de Participación los cinco primeros días de cada mes, destinados al presupuesto de la salud de San Carlos, dineros que no llegan directamente al municipio y menos al camu y sus puestos de salud.
Por no ser San Carlos un municipio certificado en materia de salud, durante la administración de la ex gobernadora Marta Sáenz, a través de un acto administrativo, se creó una figura entre la Ese Sinú, el Departamento y el camu de San Carlos a través del cual se le entregó la administración de los recursos del camu al hospital departamental más cercano, en este caso era el de Cereté.
En la oportunidad se buscaba asegurar los recursos para la atención en salud a los miles de pobladores y de paso los puestos burocráticos. No obstante la cura resultó ser peor que la enfermedad que inicialmente mostró mejoría, pero después entró en estado de gravedad porque la ESE Sinú fue liquidada despareciendo una de las partes que firmaron el convenio, y de paso dejando sin vida jurídica dicha orden u acuerdo.
Sin ley ni control
Sin embargo, a pesar del vacío jurídico el hospital Sandiego siguió manejando los dineros de la salud de los San Carleros quienes poco a poco se fueron quedando sin un centro asistencial donde los atendieran. En los cinco corregimientos donde funcionaban puestos de salud entre ellos, Carrizal, Guacharacal, San Miguel y el Hato, literalmente dejaron de funcionar por falta de recursos, o mejor dicho porque estando la plata esta no llegaba a ellos para su funcionamiento. Hoy en dichas zonas los puestos de salud están convertidos en ruinas y en otros casos sirven de albergue a familias desplazadas como en caso de San Miguel y El Hato.
En esta casa del corregimiento El Hato perteneciente a San Carlos funcionaba el puesto de salud en el que eran atendidos los pobladores que ahora deben trasladarse hasta Cereté. Por lo largo del trayecto muchas mujeres embarazadas no se están realizando los controles prenatales de rigor y tienen a sus hijos con las tradicionales «comadronas». Hoy el antiguo puesto de salud es habitado por una familia desplazada.
¿Ocultan lo evidente?
La Lengua Caribe atendiendo la denuncia de la comunidad realizó un recorrido en el municipio y evidenció el abandono en el sector sector salud que hoy viven los pobladores. Extrañamente el ingreso al Camu de San Carlos que hoy funcionaba a medias le fue negado el ingreso al reportero por orden de las directivas de la entidad, en contraste de lo estipulado en la Ley 51 de 1975 en su artículo 12 “Los funcionarios públicos y especialmente las autoridades de la Policía garantizarán la libre movilización del periodista y su acceso a lugares de información, salvo en casos reservados conforme a la ley”. Sin embargo es tal el abandono que se evidencia que sin necesidad de entrar al lugar se observa desde la parte de afuera el deterioro en los techos, y en la infraestructura. Lo que también demuestra que las directivas del Sandiego de Cereté, políticamente en manos de la ex congresista condenada por parapolítica, Zulema Jattin, también están violando lo estipulado por la ley, que indica el 5% de esos recursos del presupuesto general de los camu debe invertirse en infraestructura.
Seis meses sin salarios
La grave situación también afecta a los empleados de dicho Camu incluyendo médicos, enfermeras, administrativos y servicios generales a quienes tampoco les pagan sus sueldos hace varios meses. Un funcionario cuyo nombre La Lengua Caribe omite amparada en el artículo 12 de la ley citada anteriormente señaló.
“En el caso de los habitantes de los corregimientos mejor cogen para Montería, y el mismo Cereté, para que los atiendan, solicitan el traslado del municipio. Ese mal manejo de los recursos percapitados viene desmejorando porque no les prestan atención en sus corregimientos y aquí en el municipio (Camu) tampoco. Ellos han venido cogiendo esa plata porque hay un manejo de corrupción tremenda porque esa plata la maneja la señora Zulema Jattin, dicen que hay varias personas que se han venido beneficiando de esos dineros. Pero aquí no pasa nada ante los ojos de las autoridades. El mismo alcalde en una audiencia pública delante del Procurador, denunció la situación, pero no les importa que la gente se muera en el camino sin recibir siquiera una atención a una urgencia. El cuento aquí es que los recursos que eran para la salud de San Carlos se están tomando para sanear el déficit fiscal que tiene el hospital Sandiego de Cereté”.
La ambulancia del pueblo
En el recorrido la Lengua Caribe obtuvo otro testimonio que demuestra una vez el padecimiento de los pobladores. En San Miguel, el profesor Ernesto Izquierdo, presta su carro, un trajinado campero para transportar a los enfermos graves a cualquier hora del día y de la noche, ya que en San Miguel lo que era el puesto de salud hoy está convertida en ruinas, de un día para otro, se llevaron los implementos y equipos médicos y los pobladores no volvieron a ver la cara a un médico o a una enfermera. El sitio hoy es utilizado por un desplazado. Mientras que al profesor Izquierdo le ha tocado ver a más de un enfermo morir dentro de su carro.
Estas imágenes corresponden al antiguo puesto de salud hoy en ruinas.
De un día para otro, se llevaron los implementos y equipos médicos y los pobladores no volvieron a ver la cara a un médico o a una enfermera. hoy el antiguo puesto de salud de San Miguel es habitado por un desplazado.
Ante la falta de atención médica y la buena disposición de profe Izquierdo para transportar enfermos sus coterraneos lo reconocen hoy como la Ambulancia del pueblo. trabajo que ejerce de manera gratuita ya que desconoce para dónde cogen los recursos que llegan para la salud de su municipio. Por su parte él solo espera que su campero no le «saque mano»
En manos de la Gobernadora
Pero como reza el dicho, «mientras haya vida hay esperanzas», hoy los habitantes enfermos por el abandono administrativo y las estelas de corrupción que los ha afectado durante estos últimos 10 años esperan que en el menor tiempo tiempo posible la gobernadora Sandra Devia le dé cumplimiento a una orden de la Procuraduría General de devolver inmediatamente el Camu de San Carlos. Es decir que el municipio de Can Carlos vuelva a manejar sus recursos de salud ya que por una nueva ley cada municipio tiene que manejar su Régimen Subsidiado. Según fuentes entendidas la orden de la Procuraduría es tácita y la gobernadora Sandra Devía de no darle cumplimiento estaría incurriendo en prevaricato.
Así las cosas los pobladores esperan así sea por orden judicial tener un nuevo “aliento de vida”.