Un niño de tan solo 11 años tomó la fatal decisión de acabar con su vida lanzándose de un puente en el sureste de Francia.
De acuerdo al reporte de Jean-Michel Prêtre, fiscal de Niza, “el niño, como de costumbre, se dirigía a la parada de autobús con dos amigos para regresar a casa cuando anunció a sus camaradas que quería quitarse la vida, porque sintió pánico tras las advertencias de un maestro por haber sacado o usado un teléfono en clase”.
Posteriormente, los compañeros de la menor llamaron a los padres de la víctima y les relataron lo que pretendía hacer.
Finalmente, al llegar al sitio las autoridades y los familiares del pequeño, encontraron su cadáver debajo del puente. Por este terrible suceso las autoridades ya comenzaron las pesquisas correspondientes.