La empresa estadounidense de alimentos Kellogg´s anunció a través de un comunicado oficial el cierre indefinido de su planta en el país de Venezuela.
«El deterioro de la situación económica y social ha obligado a que la compañía detenga sus operaciones y salga del país (…) Todos los activos, compromisos y garantías legales han sido cubiertos por Kellogg’s a favor de sus empleados, clientes y proveedores», indicó la industria de alimentos su notificado.
Lo grave de la situación es que con la decisión del cierre, cerca de 500 personas quedarán desempleadas, así lo aseguró la misma compañía.
Kellogg’s llevaba más de 50 años ofreciendo sus productos en el país venezolano y fue considerado un paraíso para empresas estadounidenses.
Ante la noticia, el mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó el cierre como ilegal y señaló que pedirá una orden de captura internacional contra los dueños y accionistas de la empresa.
“Hoy en Maracay (norte del país) la empresa Kellogg, en manos de unos inversionistas mexicanos amaneció con las puertas cerradas y les depositaron en las cuentas las prestaciones sociales a los trabajadores, lo cual es completamente inconstitucional e ilegal (…) El Gobierno va Iniciar las acciones judiciales para solicitar el código rojo (de Interpol, el mayor nivel de alerta) para los dueños, accionistas de la empresa Kellogg’s, para que paguen en los tribunales”.