El hacinamiento sigue siendo la piedra en el zapato de las cárceles en Colombia, a esto se le suma el servicio de alimentación que muchas veces es precario y en algunas oportunidades pone en riesgo la salud de los internos.
En esta oportunidad, Francisco Martínez Bustamante, interno de la Cárcel de Urrá en Tierralta, se encuentra en delicado estado de salud tras permanecer más de un mes en su celda con fiebre alta y en avanzado estado de desnutrición.
Según los familiares del reo oriundo de Valledupar, este se debate entre la vida y la muerte en el Hospital San José del Alto Sinú, debido a que en el centro penitenciario no recibió la atención médica necesaria y, al parecer, el Inpec se negaba a trasladarlo a un centro asistencial.
Ante esta situación, los internos de la cárcel realizaron una huelga para que Martínez Bustamante recibiera atención médica, por lo que los funcionarios decidieron llevarlo al hospital de Tierralta donde permanece hace más de 48 horas sin un diagnostico definido.
No obstante, el Inpec no ha autorizado el traslado del recluso a una clínica u hospital en Montería para que le realicen los exámenes pertinentes.
“No sabemos qué está pasando, por qué tanta lentitud. Mi papá se está muriendo y no vemos que el Inpec quiera salvarle la vida. Es un ser humano, pedimos ayuda del gobierno para que se le brinde la atención médica que necesita”, manifestó una de las hijas de Francisco.
Finalmente, se logró establecer que la Secretaría de Salud de la Gobernación de Córdoba anunció que Martínez será remitido al hospital San Jerónimo de Montería, donde será valorado por los médicos de turno.