Luego de desarrollarse la audiencia anticipada que solicitó el mismo exsenador sahagunense, Bernardo “El Ñoño” Elías, el excongresista aceptó los cargos que se le acusan y le pidió perdón al país por sus actos de corrupción aprovechándose de su cargo en el Senado de la República.
Pese a que “Ñoño” le pidió perdón al país y a las 140 mil 143 personas que votaron por él en las elecciones pasadas, hay acciones que lo dejan todavía mal parado, y lo que estaría haciendo con dicho “arrepentimiento”, sería perder más credibilidad, ya que “reencarnaría” políticamente lanzando a su hermano Julio Elías Vidal a la Cámara de Representantes por Córdoba.
Así mismo, la “jugadita” política orientada por “Ñoño” desde La Picota, deja el panorama nítido, recuperará su curul con su excompañero de fórmula el representante Eduardo José Tous, mientras que la de Tous será ocupada por su hermano Julio Elías Vidal.
Pero, ¿Qué podrían pensar los colombianos ante esta decisión del Ñoño Elías? Si hasta este momento, su hermano es un desconocido en la política, incluso en el departamento de Córdoba, el único lugar de la región donde lo distinguen es en Sahagún, ya que hasta hace poco se dedicaba a sus negocios particulares en el municipio. Amanecerá, y veremos.