Muchos años tuvieron que pasar para que Colombia pudiera sentir el béisbol internacional en su mayor expresión. Desde el pasado viernes y hasta este domingo, la Selección colombiana de Béisbol fue protagonista del Clásico Mundial, el primero que disputaba en su historia.
Los peloteros nacionales consiguieron una victoria frente a Canadá (4-1) y cayeron en dos oportunidades, ante Estados Unidos (3-2) y República Dominicana (10-3), con esta marca el manager del equipo colombiano, Luis Urueta, se retiró del torneo orbital haciendo historia.
“Quizás estas presentaciones del equipo abran muchos ojos y se nos reconozca un poquito más”, afirmó Urueta luego de la derrota de este domingo en un partido que tuvo 11 entradas frente a los dominicanos.
Y es que los peloteros colombianos son el equipo más joven del campeonato, con jugadores de gran talento deseosos de dejar en alto los colores del país. Beisbolistas que se conocen desde niños, tal y como lo destacó Donovan Solano, quien además resaltó que muchos de ellos nunca habían pisado un estadio de Grandes Ligas.
Colombia cayó contra el local en un primer duelo muy reñido, luego ajustó su primera victoria frente a Canadá, para luego caer en el último ante República Dominicana, resultados que no evitaron hacer sentir a Urueta: “Duele mucho, ¿no? Estuvimos a 90 pies de sorprender al mundo y de dejar a la República Dominicana con la boca abierta. No hay palabras para describirlo. No se ganó, pero se ganó mucho por dentro. Se ganó mucho respeto de la gente”.
Y es que precisamente, un país conocido por el fútbol más que por otro deporte, dejó una gran impresión ante los amantes de la pelota caliente en el mundo, las actuaciones en el Marlins Park de Miami fueron una gran oportunidad para que los ojos del mundo volteen a mirar a Colombia.
Sin duda, la Selección de Colombia se va de Miami con la frente en alto, es su primera participación en un torneo de tal magnitud y sin duda alguna en la próxima versión del Clásico Mundial la novena nacional podría hacer un papel más importante.