La administración departamental tendrá que hacer las gestiones ante el Ministerio de Educación Nacional para que autorice el nombramiento de los profesores para la comunidad indígena Embera, del alto Sinú.
Ese fue el principal compromiso asumido para que los miembros de la minoría étnica decidieran retornar a sus hogares, luego de permanecer durante cinco días en los bajos de la Gobernación de Córdoba para protestar por el abandono al que han sido sometidos por parte de la Gobernación de Córdoba.
La Secretaría de Educación de Córdoba asumió el compromiso de adelantar los trámites porque hasta el momento no se ha contratado, a través de la figura del banco de oferentes, a los profesores para que dicten clases en las zonas de difícil acceso y que no están contemplados en la nómina formal del Ministerio.
En la mesa de trabajo, los voceros de la administración representados en el funcionario Roberto Tirado, recalcaron que la potestad para el giro de los recursos destinados al nombramiento de la planta de docentes que faltan en las plazas indígenas, es exclusiva del Ministerio de Educación.
Los indígenas por su parte pidieron celeridad porque ya están a mediados del año lectivo y los estudiantes no han empezado a ver las clases, indicando que eso es responsabilidad exclusiva del gobernador Edwin Besaile, quien debió hacer los trámites desde el primer mes del año.
Luego de la firma y socialización de los compromisos, los Emberas empezaron a recoger sus elementos desde las primeras horas del sábado y a bordo de varios buses empezaron a retornar a sus hogares.