Al igual que en la famosa serie oriental “Súper Campeones”, donde uno de sus protagonistas, Roberto Sedinho, es una gran influencia para el fútbol japonés y la vida de Oliver Atom; la gran gloria del fútbol brasilero Zico, ha sido un gran referente en el país nipón, además de convertirse un gran ídolo en este país y una influencia para el Kashima Antlers.
En Japón este deporte se profesionalizó en 1992, es relativamente un deporte joven en el país asiático. Justamente a poco más de 100 kilómetros de la capital, Tokio, queda la pequeña localidad de Kashima, donde habitan aproximadamente 70 mil personas.
Esta es una de las industrias metalúrgicas más importantes del mundo, es el lugar de inspiración de la esgrima japonesa y actualmente tiene al equipo finalista del Mundial de Clubes, lo cual enorgullece a los lugareños de esta zona.
El Kashima Antlers es el club que más veces ha sido campeón del balompié japonés, ha conquistado 8 ligas, 5 supercopas, 6 copas y 2 copas Suruga Bank, trofeo que perdió este año 2016 con Independiente Santa Fe, campeón de la Copa Sudamericana.
Zico, conocido como “El Pelé Blanco”, talentoso exfutbolista, arribó a este equipo en 1991, cuando tenía 38 años. Jugó tres temporadas con el Kashima y después estuvo seis años en el cuerpo técnico. En el año 2000 abandonó el equipo.
Fue tanta la influencia del deportista carioca que el estadio del Kashima cuenta con una estatua de él y una placa con sus huellas, las cuales serán imborrables en el fútbol nipón, que encontró en Zico un estilo de juego que le sirvió de guía hasta el presente.
La influencia sudamericana en Japón sigue, y no es raro que hoy en día las pelotas que ruedan en la isla sean pateadas por muchos jugadores brasileros, además que diversos técnicos de este país dirigen a sus clubes.