Prosperidad de Montería en la mira de la politiquería

Prosperidad de Montería en la mira de la politiquería


Por: Raúl Benítez

Reza el adagio popular «quien no conoce su historia, está condenado a repetirla». Nada mas cierto y más parecido a la realidad que hoy se vislumbra en Montería; cuenta la historia colombiana que en el año 1958 se fraguó una de las coaliciones más oscuras de la política conocida como el Frente Nacional, un  acuerdo político entre liberales y conservadores vigentes en Colombia entre 1958 a 1974.

Sus principales características durante este acuerdo fueron la sucesión de cuatro períodos (16 años) de gobierno de coalición; la distribución equitativa de ministerios y burocracia en las tres ramas del poder público (Ejecutiva, Legislativa y Judicial); candidato presidencial elegido por acuerdo bipartidista; y la distribución igualitaria de las curules parlamentarias hasta 1968. El principal objetivo de este acuerdo político fue la reorganización del país luego del período presidencial del general Gustavo Rojas Pinilla.

Hoy parece que la historia se repite en Montería, la ‘Villa Soñada’, una coalición que esta vez no busca acabar con el gobierno de presidente, sino que busca acabar con la prosperidad que desde el 2008 catapultó a esta ciudad como una de las más sostenibles de Colombia y el mundo.

Atrás quedaron los años oscuros y retrógrados por los que pasó la capital cordobesa hasta el año 2007, donde solo administraban los recursos de este municipio para su provecho; todo inicia de la mano del entonces joven Marcos Daniel Pineda y su primera administración quien desde su primera administración logró mostrar grandes avances en nuestra ciudad y compaginar con los jóvenes, de su mano y visión, Montería da un saldo urbanístico que la  lleva a ser reconocida como una de las capitales con mayor desarrollo en Colombia.

Hemos sido testigos de la #MonteríaAmable, esa que llenó de parques la ciudad para los niños, la que nos entregó una recuperación urbanística palpable a simple vista, recuperar la malla vial, la ronda del Sinú, catapultar la educación de nuestros niños, disfrutar de una verdadera Villa Olímpica, entre otro sin número de obras, que a lo largo de tres gestiones engranadas bajo este hombre han transformado esta ciudad, todas estas obras han generado gran impacto, pero una en especial merece atención especial.

El crecimiento en infraestructura hospitalaria a través de ESE Vida Sinú y la entrega de 16 centros de salud de alta calidad, han sostenido la salud de los monterianos y que es un indicador de bienestar social, gestión que contrasta con el hoy moribundo y arruinado Hospital San Jerónimo de Montería, el ultimo fortín de las mayorías liberales y cuyo paupérrimo estado nos retrotrae a la época oscura y subdesarrollada de Montería durante las administraciones de las mayoría liberales.

Durante estos años han habido grandes logros y aún existen cosas por mejorar, lugares a los que #MonteríaAmable aún no llega y con los cuales se encuentra en mora, sin embargo fueron tantas administraciones ineficaces, más de las que puedo recordar, y tan poco el tiempo de #MonteríaAmable, que nos obliga a seguir esta senda y a recordar que era y que es hoy de Montería.

Salin Ghisays, es hoy ese líder que representa la continuidad de una gran administración, no representa una de las mejores opciones para los monterianos sino la mejor, es el encargado de tomar las riendas de esta ciudad y seguir adelante con los triunfos alcanzados, triunfos que al igual que su actual campaña se construye sobre ruedas y con cada pedalazo sobre su bicicleta.

Estamos próximos a elegir el destino de nuestra urbe, esa urbe que se erige sobre un valle de espléndido azul, podemos continuar por el sendero que desde el 2008 se viene construyendo o devolverles la ciudad a las administraciones pasadas, esas que tienen en ruina al Hospital San Jerónimo, esas que durante años dejaron que nuestro parque de la Avenida primera fuera un nido de ampones y drogadictos, las que mantuvieron nuestra capital en un caos total. No podemos repetir la historia, es nuestra obligación defender de liberales y conservadores nuestra ‘Villa Soñada’.

Hoy más que nunca, le debemos nuestra lealtad no a Marcos Daniel, no a Salin Ghisays, no a un hombre, sino a sus ideales y ante todo #LealtadConMontería.