La situación no es nueva, es común entre los residentes de los sectores El Pozón y la Calle de los Ocho en Ayapel, observar cómo son arrojados directamente a la Ciénaga desechos, producto del procesamiento de arroz.
Según los residentes al parecer los propietarios de por lo menos tres molinos arroceros contratan a personas para que arrojen grandes cantidades de cascarilla de arroz, al espejo de agua, sin que hasta el momento haya existido un control o sanción por parte de las autoridades ambientales del departamento representada por la CVS.
«La mayor cantidad de cascarilla o desechos están siendo arrojados en puntos como El Playón y el Tronco, ya que los molinos operan cerca del complejo cenagoso, en sitios como Puerto de la Ceiba, Cerca del antiguo Idema y otro más afuera cuyos propietarios durante unos 15 años han practicado este ejercicio en contra del sostenimiento ambiental de la Ciénaga sin ningún tipo de control o regulación» sostuvo uno de los residentes en el sitio de Albergue ubicado en la sede del antiguo Idema
Afirma la fuente que en otras oportunidades dichos residuos no son arrojados a la Ciénaga sino que son dispuestos como basureros a cielo abierto y en otras ocasiones son quemados.
Así las cosas ante el inminente daño ambiental tanto al recurso hídrico como al suelo es que los habitantes solicitan un control por parte de la CVS. En el video se evidencia el descargue y disposición final de los residuos en zona cenagosa.