Una temporada para el olvido terminó en la noche de este jueves para el Junior de Barranquilla que perdió frente a Nacional la final de la Copa Águila con marcador global de 3 – 1.
Los malos resultados, la eliminación de la Liga Águila, la Copa Sudamericana y la derrota en la Copa Águila, fueron el detonante para que los hinchas tiburones no aguantaran más y protagonizaran actos reprochables dentro y fuera del Estadio Metropolitano.
Adentro del estadio enfrentamientos con la Policía suspendieron el juego por algunos minutos, por lo que la gente temerosa prefirió irse del escenario deportivo.
Sin embargo los 1.200 uniformados que desplegó la Policía Metropolitana de Barranquilla no fueron suficientes para evitar los desmanes de hinchas identificados al Junior. Rompieron buses, increparon a los agentes del Esmad mientras que inocentes corrían despavoridos por las detonaciones de los gases lacrimógenos.
Disturbios en los alrededores del estadio Metropolitano https://t.co/QBhuiwI1CE pic.twitter.com/aOZKN1BUsA
— EL HERALDO (@elheraldoco) November 18, 2016
[ATENCIÓN] Ahora es afectado por vándalos el 13056 cerca de la Estación Pacho Galán. pic.twitter.com/XbrDx0LLYU
— transmetrobaq (@transmetrobaq) November 18, 2016