La Contraloría de Córdoba iniciará una auditoría de todas las actuaciones de la suspendida gerente del hospital San Jerónimo de Montería, Isaura Hernández Pretelt, durante el año inmediatamente anterior.
El anuncio fue hecho por el titular de esa cartera, Emilio Otero, quien indicó que luego de las denuncias sobre las presuntas irregularidades cometidas en el centro asistencial, iniciarán la auditoría exprés.
El anuncio coincide con la decisión de la Procuraduría General de la Nación de suspender a la funcionaria por haber hecho movimientos a la planta de personal, pese a estar en plena ley de garantías.
También forma parte de una serie de denuncias hechas por los especialistas, quienes han prendido las alarmas por una serie de irregularidades que ponen en vilo la salud de los pacientes.
«Es de conocimiento público, y en gran medida por nuestras denuncias, de que existen graves falencias en el suministro de drogas, equipos y demás insumos médicos necesarios y suficientes para la atención oportuna y eficaz de los pacientes. Ésta grave falla administrativa es un grave delito, es un atentado a la dignidad humana de los pacientes y se paga con vidas humanas», dijo el especialista Jorge Ordosgoitia en una carta pública que terminó costándole el puesto en el hospital San Jerónimo, pues por atreverse a denunciar fue despedido por Hernández Pretelt.