¿Bukele podría ser presidente de Centroamérica?, propone unir 8 países en un solo estado desarrollado

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, sorprendió con una propuesta que podría cambiar el mapa político del Caribe y Centroamérica: unir a ocho países bajo un modelo de integración similar al de la Unión Europea. Junto al vicepresidente Félix Ulloa, presentó la iniciativa que busca consolidar un bloque regional con órganos conjuntos como un parlamento, un tribunal, un consejo de ministros y una comisión de unión. El objetivo: atraer inversión, fortalecer la cooperación institucional y posicionar a la región como un actor global.

La propuesta busca sumar a Panamá, Costa Rica, Belice, Nicaragua, Honduras, República Dominicana, Guatemala y El Salvador dentro del Sistema de Integración Centroamericana (SICA). Aunque el Protocolo de Tegucigalpa de 1991 ya abrió el camino para este tipo de integración, los retos son enormes: pobreza, narcotráfico, desempleo, crisis políticas y corrupción. Ulloa aseguró que “más que una unión, sería una integración con objetivos regionales comunes”, pero analistas advierten que la viabilidad del proyecto depende de la voluntad real de los gobiernos involucrados.

Para muchos, esta jugada posiciona a Bukele como aspirante a liderazgo regional. Su popularidad interna, respaldada por el estado de excepción y el control del Legislativo, le ha permitido avanzar en proyectos que antes eran impensables. Incluso logró que las altas cortes autorizaran su reelección, pese a la prohibición constitucional, lo que ha alimentado su imagen de “líder fuerte” y su apodo viral en redes: “el dictador más cool del mundo”.

Si se concreta, esta integración marcaría un hito histórico en América Latina. Pero también podría abrir la puerta a tensiones diplomáticas, disputas de poder y resistencia interna en países que temen perder autonomía. ¿Es Bukele el nuevo Bolívar o solo un estratega con ambiciones continentales? La región observa con cautela mientras el sueño de una Centroamérica unificada vuelve a tomar forma… esta vez con nombre propio.