El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, encendió el debate político durante el Congreso Empresarial Colombiano de la Andi al referirse al asesinato de Miguel Uribe Turbay. Aunque aclaró que no podía señalar directamente al presidente Gustavo Petro como responsable, sí lanzó una fuerte afirmación: “Si Petro no fuera presidente, Miguel estaría vivo”. El comentario reavivó las discusiones sobre la responsabilidad política del Gobierno en garantizar la seguridad de líderes opositores.
La declaración se dio este 15 de agosto, en medio de un evento que reunió a los alcaldes de las principales ciudades del país. Gutiérrez, cercano al senador asesinado, recordó que en Medellín se decretaron tres días de duelo tras su muerte, ocurrida el pasado 11 de agosto después de 65 días en una UCI. Durante el congreso, los mandatarios locales se unieron portando una bandera de Colombia, gesto que fue aplaudido por los empresarios asistentes.
El recuerdo de Miguel Uribe también marcó la jornada con la intervención de su padre, Miguel Uribe Londoño, quien pidió justicia y que el caso sea declarado crimen de lesa humanidad. Según la defensa de la familia, el ataque no fue un hecho aislado, sino parte de una persecución política contra el Centro Democrático. Mientras la Fiscalía avanza en la investigación, crece la presión para que el crimen no quede en la impunidad y se esclarezcan todos los responsables.