En medio del revuelo que generaron las cartas del excanciller Álvaro Leyva, quien insinuó que el presidente Gustavo Petro tendría problemas de adicción, Laura Sarabia decidió hablar. El pasado miércoles 6 de agosto, en entrevista con la periodista Darcy Quinn, la exjefa de gabinete dejó claro que nunca ha visto nada que respalde esas acusaciones. “Nunca me ofreció un trago, nunca lo vi tomado ni con comportamientos extraños”, dijo tajantemente, desmintiendo también los rumores sobre supuestos videos comprometedores.
Sarabia, quien próximamente será embajadora, aseguró que su relación con el presidente ha sido estrictamente profesional y que nunca ha compartido fiestas con él. “No tengo nada que decir sobre su vida privada, porque no tengo nada que contar”, agregó. Además, aprovechó para destacar que Petro siempre ha mostrado respeto hacia las mujeres, dando por cerradas las especulaciones que han circulado en redes y medios durante las últimas semanas.
Durante la entrevista, Sarabia también habló de su relación con Armando Benedetti, reconociendo tensiones pasadas, pero asegurando que eligió el camino del perdón. Lo más emotivo, sin embargo, fue cuando recordó la muerte del coronel Óscar Dávila, un hecho que calificó como el momento más duro de su vida. “Eso partió mi historia en dos”, dijo con la voz entrecortada.