Enfermera se asomó al balcón de su casa para ver una pelea y murió por una bala perdida

La madrugada del domingo 13 de julio se tiñó de tragedia en el barrio Nuevo Éxito de Soledad, Atlántico, cuando Darianny José Socarrás Prado, una joven enfermera de 29 años, fue víctima de una bala perdida mientras observaba una riña desde el balcón de su vivienda. El hecho ocurrió hacia las 5:35 a. m., cuando varios sujetos protagonizaban una disputa en la carrera 27 con diagonal 54-36. En medio del caos, uno de ellos disparó al aire de forma indiscriminada, y uno de los proyectiles impactó a Darianny.

La víctima, oriunda de Riohacha y madre cabeza de hogar de tres niñas, se preparaba para iniciar su jornada laboral como auxiliar de enfermería. Su hija mayor fue testigo del momento en que su madre cayó al suelo, mientras sus hermanitas dormían. El disparo, que ingresó por la región temporal izquierda, le causó la muerte de forma instantánea. Los vecinos están consternados y, exigen justicia ante una pérdida que dejó huérfanas a tres menores y enlutó a toda una comunidad.

Las autoridades locales, junto con la Policía Metropolitana de Barranquilla y el CTI, iniciaron la recolección de evidencias para identificar al responsable. Según reportes preliminares, el presunto autor sería un sujeto conocido como alias “Carlitos”, quien habría estado involucrado en la riña y disparó sin medir las consecuencias. La Fiscalía y la Sijín avanzan en la investigación, mientras familiares y vecinos claman por una captura que evite la impunidad.

El caso de Darianny no solo refleja la fragilidad de la vida ante la violencia urbana, sino también la urgencia de regular el uso de armas y prevenir riñas que terminan en tragedias. Su historia, marcada por la lucha y el amor maternal, se convierte hoy en símbolo de una sociedad que no puede seguir normalizando la muerte de inocentes.