Un caso que tiene impactado a Brasil y al mundo entero es el de Camilo Aldebaran, un adolescente de 14 años que asesinó a sus padres y a su hermanito de 3 años en Itaperuna, Río de Janeiro. Su novia virtual, una menor de 15 años con la que llevaba años chateando por videojuegos y redes sociales, lo presionó para que se deshiciera de su familia porque no lo dejaban viajar a conocerla.
La historia tomó un giro aún más aterrador cuando salieron a la luz los chats entre los jóvenes, en los que ella le daba instrucciones explícitas para ocultar el crimen. Según los investigadores, le pidió incluso que usara a su hermanito para dejar huellas falsas y que quemara los cuerpos o los arrojara a los cerdos para no dejar rastro. La policía confirmó que la joven lo habría instigado desde el principio hasta después del crimen.