El escándalo que rodea al representante David Racero ha sacudido el panorama político, con múltiples sectores exigiendo su renuncia. Las acusaciones en su contra han puesto en jaque a uno de los rostros más visibles del Pacto Histórico, pero lo que más ha llamado la atención es el silencio de Gustavo Petro, quien hasta ahora ha evitado pronunciarse directamente sobre el tema.
El senador Jota Pe Hernández, de Alianza Verde, no dudó en cuestionar la actitud del mandatario, señalando que cuando se trata de atacar a la oposición, Petro es contundente, pero cuando el escándalo toca a sus aliados, su postura cambia.
«Maneja un doble rasero y lo hace de forma subliminal», afirmó Hernández, dejando en evidencia la tensión dentro del oficialismo.