El chavismo, ayer 25 de mayo, se hundió en su propia farsa electoral

El domingo 25 de mayo, Venezuela vivió unas elecciones regionales y parlamentarias marcadas por la apatía ciudadana y el rechazo al régimen de Nicolás Maduro. Lo que el oficialismo esperaba que fuera una jornada de movilización terminó convirtiéndose en un espectáculo de centros de votación vacíos y una participación mínima.

Según datos de Meganálisis, apenas el 15 % de los votantes acudió a las urnas, reflejando el descontento generalizado de la población. La oposición y diversos analistas han señalado que este resultado es una muestra clara del rechazo al proceso electoral, que consideran una estrategia para perpetuar el control del chavismo.

Las imágenes de los centros desiertos han dado la vuelta al mundo, dejando en evidencia la crisis política y la falta de legitimidad del régimen.