Para nadie es un secreto que los delincuentes en Colombia hacen lo que quieren. El pasado sábado 26 de abril, los guardianes del Inpec en la cárcel La Picota de la ciudad de Bogotá se dieron cuenta en medio de una revisión al pabellón 26 que uno de sus internos se había volado.
El hombre se escapó por una ventana de la celda, descendió por una tubería de aguas negras hasta llegar al primer piso del piso 3 y se arrastró por las alcantarillas que se direccionan a la vía pública de las afueras de la cárcel.
Tras confirmarse la fuga del hombre, el Inpec informó de inmediato a la Policía Metropolitana de Bogotá para empezar con los operativos y dar con su recaptura. Las autoridades mantienen las alertas en la capital y piden ayuda a la ciudadanía con informaciones que contribuyan con la recaptura del delincuente.