Lo que parecía un hurto perfecto terminó siendo un manual de «cómo no robar un celular». Un joven en moto despojó a su víctima de un teléfono de alta gama, pero su error fue celebrar como si hubiera ganado un premio. Sin saberlo, cada selfie que se tomaba con su novia llegaba directamente al dueño original del dispositivo.
“El tipo, después de quitarme el celular, fue donde su novia a presumir su nuevo ‘trofeo’ y se tomó varias fotos posando como si fuera modelo”, contó la víctima, quien no perdió tiempo y viralizó las imágenes en redes sociales con un mensaje contundente: “Este es el sujeto que tiene mi celular, al parecer también viaja de Barranquilla a Santa Marta para hacer lo mismo”. Las redes no tardaron en explotar con comentarios como: “Mira amor, el celular nuevo que tengo, vamos a tomarnos unas fotos”.
Ahora, las autoridades están tras la pista del presunto ladrón más fotogénico de Colombia, mientras tanto, los internautas no paran de reír con esta historia que demuestra que, a veces, el karma llega en forma de selfie.