Hace pocas horas se registró un hecho indignante en el sector de Alamedas del Río, Barranquilla, una trabajadora que se gana la vida vendiendo arepas fue tratada de manera injusta por funcionarios de Espacio Público y un grupo de policías.
Este incidente ha desatado una ola de indignación entre los vecinos y transeúntes, quienes consideran que la acción de las autoridades fue desproporcionada y carente de empatía.
La comerciante expresó su desesperación al ver cómo su única fuente de ingresos le era arrebatada.
La comunidad ha solicitado una respuesta de las autoridades locales para buscar soluciones que permitan a los vendedores informales trabajar de manera digna y sin el temor constante de perder su sustento.