En un giro histórico para la justicia colombiana, la Fiscalía General de la Nación solicitó este martes un fallo condenatorio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por los delitos de fraude procesal, soborno y soborno en actuación penal. La fiscal del caso, Marlene Orjuela, aseguró que las pruebas recaudadas durante el juicio demuestran que Uribe fue el “determinador” de una estrategia para manipular el curso de la justicia penal.
Según la Fiscalía, el exmandatario habría promovido un “peregrinaje carcelario” a través de terceros, con el objetivo de conseguir retractaciones de testigos clave como Juan Guillermo Monsalve y Pablo Hernán Sierra, quienes lo habían vinculado con estructuras paramilitares. Las interceptaciones, documentos y testimonios presentados en juicio habrían dejado en evidencia una supuesta operación para construir una narrativa favorable a Uribe.
Durante los alegatos finales ante la juez 44 Penal del Circuito de Bogotá, la fiscal Orjuela fue enfática: “No hay duda de que el acusado ideó, promovió y respaldó una estrategia para alterar la administración de justicia”. La Fiscalía sostiene que el expresidente utilizó a abogados cercanos para ofrecer beneficios a testigos a cambio de modificar sus versiones judiciales.
Este proceso, que ha captado la atención nacional e internacional, entra en su recta final tras más de 50 audiencias. Se espera que el fallo de primera instancia se conozca antes de agosto. De confirmarse la condena, sería la primera vez en la historia reciente que un expresidente colombiano es hallado culpable por delitos relacionados con manipulación de testigos.