La crisis del agua en San Carlos ha alcanzado niveles alarmantes. La fuerte sequía que azota la región ha dejado a miles de personas sin acceso al preciado líquido. La comunidad clama y suplica por una solución, pero la administración de Fray Monterrosa parece estar de brazos cruzados.
En un giro irónico del destino, Monterrosa, quien en el periodo de Leda López criticaba ferozmente la gestión del agua, ahora se encuentra en el centro de la tormenta, incapaz de resolver el problema que tanto condenó.
La situación es crítica. Los habitantes de San Carlos no ven ni un solo carrotanque en sus veredas y corregimientos. La falta de agua ha llevado a la desesperación a muchas familias, que deben recorrer largas distancias para conseguir un poco de agua. Mientras tanto, la alcaldía sigue sin ofrecer soluciones concretas. La comunidad se siente abandonada y traicionada por un líder que prometió cambios y mejoras, pero que ahora parece haber olvidado sus promesas.
Las estadísticas son devastadoras. Más del 70% de la población de San Carlos sufre de escasez de agua, y la situación empeora cada día. La falta de planificación y la mala gestión de recursos han dejado al municipio en una situación insostenible.
La comunidad exige respuestas y acciones inmediatas, pero la administración de Monterrosa sigue sin dar la cara.
¿Hasta cuándo tendrán que esperar los habitantes de San Carlos para ver una solución real a esta crisis? La paciencia se agota y la desesperación crece.