En un operativo sorpresa, la Policía Metropolitana de Montería capturó a Aldemar Luna, un hombre de 64 años que fue sorprendido con 22 botellas de ñeque listas para la venta. El hecho ocurrió en pleno centro de la ciudad, donde el adulto mayor intentaba comercializar la bebida artesanal en botellas plásticas, desafiando las normas sanitarias y penales del país.
El ñeque, un licor prohibido en Colombia, es elaborado de forma rudimentaria desde hace más de 125 años y es considerado un delito por imitación y simulación de alimentos o sustancias, según el Código Penal. Aunque para muchos es parte de la tradición popular, las autoridades lo catalogan como un riesgo para la salud pública por su alta concentración de alcohol y su fabricación sin control sanitario.
Con esta incautación, la Policía aseguró haber dado un “duro golpe” al tráfico de licores clandestinos. Sin embargo, en redes sociales la noticia ha generado más burla que aplausos. “¿Y los corruptos pa’ cuándo?”, “Ese ñeque es medicina pa’l alma”, y “Déjenlo que está trabajando”, fueron algunos de los comentarios que inundaron las plataformas digitales, donde muchos cuestionan las prioridades de la fuerza pública.
Mientras tanto, las 22 botellas de ñeque quedaron bajo custodia policial, y Aldemar Luna deberá responder ante la justicia por violar las normas sanitarias y de comercialización. En Montería, el ñeque sigue siendo parte del debate entre tradición, necesidad y legalidad.