La elección de Carlos Camargo como nuevo magistrado de la Corte Constitucional sigue generando polémica, tensiones y todo tipo de molestias dentro del Pacto Histórico. El exsenador y precandidato presidencial Gustavo Bolívar lanzó duras críticas tras la derrota de Patricia Balanta, la candidata cercana al Gobierno, y aseguró que varios congresistas de la misma coalición oficialista “se voltearon a última hora”. En redes sociales, Bolívar cuestionó con ironía si a esos legisladores “les llegaron al precio”, dejando en el aire dudas sobre posibles negociaciones por debajo de la mesa.
El presidente Gustavo Petro también reaccionó con molestia desde Japón, donde cumple agenda diplomática. Aunque negó que buscara controlar la Corte, dejó claro su desconfianza hacia Camargo, a quien criticó por guardar silencio en momentos clave del país. El mandatario sostuvo que solo confiará en los congresistas que, según él, no traicionaron el proyecto democrático y se mantuvieron firmes en la votación.
La derrota en el Senado ya empezó a traer consecuencias dentro del Gobierno. Angie Rodríguez, directora del Dapre, pidió la renuncia de varios ministros, entre ellos Antonio Sanguino (Trabajo), Julián Molina (TIC) y Diana Morales (Comercio), quienes tenían vínculos con partidos que no respaldaron la línea oficialista. Ahora, el encargado de manejar esta crisis política será Armando Benedetti, ministro del Interior y actual delegado presidencial mientras Petro se encuentra en el exterior.