La ministra de Relaciones Exteriores, Laura Sarabia, está bajo la lupa de la Fiscalía delegada ante la Corte Suprema de Justicia, que ha abierto una indagación preliminar en su contra.
La investigación surge tras una denuncia que la vincula con presuntos delitos de enriquecimiento ilícito, lavado de activos y concierto para delinquir agravado, despertando sospechas sobre posibles irregularidades en el manejo de recursos públicos.
El caso tomó fuerza luego de que la Red de Veedurías de Colombia presentara una denuncia en junio de 2024, señalando inconsistencias en el crecimiento patrimonial de empresas ligadas a su familia. En respuesta, la Fiscalía ha solicitado registros oficiales sobre los ingresos, compensaciones y viáticos percibidos por Sarabia desde 2022, con el fin de esclarecer los hechos denunciados.