Una reciente revelación ha puesto en el ojo del huracán a la Unidad Nacional de Protección UNP. Según informaciones, Pedro Luis Hernández, exintegrante de las FARC y condenado a 26 años de cárcel por rebelión y secuestro extorsivo, estaría hoy vinculado como escolta dentro de la entidad encargada de proteger a líderes sociales, periodistas y funcionarios públicos.
Este dato ha desatado una fuerte polémica en redes sociales y sectores políticos, que cuestionan cómo una persona con ese historial terminó prestando servicios de seguridad en una institución del Estado. Aunque Hernández habría salido en libertad tras acogerse al acuerdo de paz, su presencia activa en la UNP levanta dudas sobre los filtros de selección y el manejo interno de la entidad.