En un caso que parece sacado de una novela, Reinaldo Romero Ortega, auxiliar de justicia en Ibagué, fue capturado tras protagonizar una inimaginable estafa.
El hombre, encargado de custodiar un tractocamión valorado en más de 200 millones de pesos mientras se resolvía un proceso legal, habría decidido que era mejor negocio venderlo… no una, ni dos, sino tres veces.
Lo más increíble de esta historia es que el dichoso camión ni siquiera era suyo y dejó una larga lista de víctimas a su paso. El primero en salir afectado fue el propietario original, quien confió en el sistema judicial para proteger su bien; seguido de un comerciante de Cartago, quien pagó 180 millones de pesos por el camión.
Asimismo, una empresa de Bogotá, que firmó un contrato de arrendamiento por 3 millones de pesos y el último comprador, quien entregó dos vehículos y dinero en efectivo, cayeron en la elaborada trampita.
Finalmente, Romero Ortega fue capturado en Tolima por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) con el apoyo de la Sijin de la Policía Nacional.
Ahora, un fiscal de la Unidad de Administración Pública de la Seccional Tolima le imputó los delitos de: fraude a resolución judicial, falsedad ideológica en documento público, falsedad en documento privado, fraude procesal y peculado por apropiación, pero no aceptó los cargos.
Con información de El Tiempo