Los gobernadores del país, a través de la Federación Nacional de Departamentos, encendieron las alarmas frente al estado crítico en el que se encuentran las EPS del país. En una carta enviada al Ministerio de Salud, afirmaron que muchas de estas entidades de salud están al borde del colapso financiero, llevando el peso de deudas millonarias que ponen en juego y riesgo la atención médica de millones de colombianos.
Según la Federación, más de la mitad de los afiliados al sistema, cerca del 55%, están en manos de EPS que enfrentan graves dificultades económicas. Desde 2023, nueve han sido intervenidas y, si no se actúa pronto, la deuda podría superar los 17 billones de pesos este año. La preocupación es clara: si no hay soluciones rápidas, la red hospitalaria se quedará sin cómo operar.