Dos policías fueron asesinados por las Farc mientras almorzaban

Dos policías fueron asesinados en un ataque armado perpetrado en el corregimiento de San Joaquín, jurisdicción del municipio de El Tambo, Cauca. Las víctimas, el intendente Willi Walberto Carabalí Carabalí y el patrullero Fabián Andrés Robayo Rocha, se encontraban almorzando en un establecimiento comercial cuando fueron sorprendidos por sicarios que descendieron de una camioneta y abrieron fuego de manera directa. El hecho, atribuido preliminarmente al frente Carlos Patiño de las disidencias de las FARC, se enmarca en lo que las autoridades han catalogado como un nuevo episodio del llamado “plan pistola” contra la Fuerza Pública.

La secretaria de Gobierno del Cauca, Maribel Perafán, condenó el atentado y expresó su solidaridad con las familias de los uniformados: “Hoy nuevamente hay luto en el departamento del Cauca. Dos de nuestros policías ofrendan la vida por la seguridad y la convivencia en nuestros territorios”. Tras el ataque, se activó un “plan candado” con apoyo aéreo para dar con los responsables, quienes huyeron hacia el municipio de Timbío en dirección a la vía Panamericana.

Este doble homicidio se suma a una preocupante escalada de violencia en el suroccidente colombiano. En menos de una semana, tres policías han sido asesinados en el Cauca, incluyendo la patrullera Maryuri Ramos Mamián, víctima de un ataque con explosivos en Santander de Quilichao. Las autoridades atribuyen estos hechos a estructuras armadas ilegales como el frente Carlos Patiño, liderado por alias ‘Faiber’, y el frente Dagoberto Ramos, ambos vinculados a disidencias de las FARC que operan en la región junto al ELN.

El recrudecimiento de los ataques contra la Fuerza Pública en zonas rurales del Cauca evidencia el control territorial que mantienen estos grupos armados, pese a los esfuerzos del Gobierno por avanzar en la estrategia de “Paz Total”. Mientras se anuncian refuerzos militares y recompensas por información, el departamento sigue siendo epicentro de una guerra silenciosa que cobra vidas y desafía la institucionalidad.