La suerte de Daneidy Barrera Rojas, mejor conocida como Epa Colombia, sigue sin cambiar. A pesar de los intentos de su abogado, Francisco Bernate, para conseguirle prisión domiciliaria, el juzgado de Bogotá volvió a negarle el beneficio, dejándola recluida en El Buen Pastor.
La decisión ha desatado una ola de comentarios, con muchos señalando que el presidente Gustavo Petro la habría dejado a su suerte, sin mover un solo dedo por ella. Mientras sus seguidores exigen una segunda oportunidad, la influencer sigue pagando su condena por instigación a delinquir con fines terroristas, daño a bien ajeno y perturbación del transporte público.
¿Será que Petro realmente le dio la espalda o nunca estuvo dispuesto a ayudarla? La polémica sigue abierta, y Epa Colombia tendrá que seguir enfrentando su realidad tras las rejas.