Las autoridades de Estados Unidos sentenciaron a cadena perpetua a Stefan Andrés Correa, ciudadano con nacionalidad estadounidense y ecuatoriana, tras hallarlo culpable de graves delitos relacionados con la explotación sexual infantil.
De acuerdo con la Alcaldía de Medellín, Correa habría viajado en múltiples ocasiones a la ciudad entre 2020 y 2024, donde contactaba a menores de edad con fines ilícitos. La condena es el resultado de la operación internacional “Cazador”, en la que participaron agencias de investigación de ambos países.