En redes sociales circula un video que ha tocado fibras muy profundas. Se trata de un niño que, con lágrimas en los ojos y una malformación facial evidente, dice una frase que toca el alma: “No te gusto, pero solo por mi apariencia”. Su sinceridad, su dolor y sus ganas de ser aceptado han logrado que miles de usuarios compartan su historia, dejando mensajes de cariño y respeto.
Aunque aún no se sabe con certeza en qué país vive el menor, ya son varios los creadores de contenido e influencers que han comenzado campañas para apoyarlo. Algunos han promovido donaciones voluntarias para brindarle atención médica o apoyo psicológico, mientras otros simplemente invitan a replicar el mensaje como símbolo de empatía.
La publicación se ha convertido en un llamado colectivo a la inclusión, al respeto y a mirar más allá de lo físico. En un mundo donde la apariencia pesa tanto, este pequeño nos recuerda lo esencial: todos merecemos amor, aceptación y dignidad.