La comunidad atraviesa momentos de dolor tras el fallecimiento de Esmerlin Lara Polanco, una joven de 23 años que se encontraba en embarazo con siete meses de gestación. El hecho ocurrió en su residencia, donde fue hallada sin vida con una herida de b4la. Según el informe preliminar del médico legista, la lesión habría sido autoinfligida, aunque las autoridades aún no han emitido una versión oficial definitiva sobre lo sucedido. La tragedia ha generado conmoción entre familiares, vecinos y sectores sociales, que lamentan la pérdida de una madre joven y su bebé en gestación. El suceso tuvo lugar en la calle José Delio Guzmán, en el municipio de Bonao, provincia Monseñor Nouel, República Dominicana.
Familiares y allegados han señalado que Esmerlin enfrentaba desde hace tiempo un estado emocional complejo, marcado por signos visibles de afectación que no lograron ser atendidos a tiempo. Además de esperar un nuevo bebé, era madre de una niña de tres años, lo que añade una dimensión aún más dolorosa a esta pérdida. El caso ha generado una profunda reflexión sobre las presiones invisibles que enfrentan muchas mujeres, especialmente durante el embarazo, una etapa de alta vulnerabilidad emocional.
Este suceso ha encendido las alarmas sobre la necesidad urgente de fortalecer los servicios de salud mental en el país, con especial atención a las madres gestantes. Expertos en salud pública insisten en que el acompañamiento psicológico debe ser parte integral del cuidado prenatal, para prevenir desenlaces como el ocurrido en Bonao.
Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del hecho, mientras la comunidad llora la pérdida de dos vidas en un solo acto: la de una joven madre, la de su bebé en gestación.