Maduro se quedó sin padrino, Brasil no lo reconoce como presidente de Venezuela

Brasil encendió las alarmas diplomáticas al declarar que no reconoce a Nicolás Maduro como presidente legítimo de Venezuela, justo cuando Estados Unidos desplegó tres buques de guerra en el Caribe, a escasos kilómetros de las costas venezolanas. La declaración fue hecha por Celso Amorim, asesor de Asuntos Internacionales del gobierno de Lula da Silva, quien además expresó su “preocupación” por la presencia militar estadounidense en la región.

“Las actas nunca aparecieron, y nunca tomamos ninguna medida para reconocer al gobierno [de Maduro]”, afirmó Amorim, dejando claro que Brasil mantiene una relación de Estado con Venezuela, pero no con su gobierno. La tensión se eleva mientras EE. UU. moviliza 4.500 soldados como parte de su estrategia contra el narcotráfico, apuntando directamente al llamado Cártel de los Soles, vinculado al régimen venezolano.

Desde la Casa Blanca, se acusa a Maduro de ser un “líder fugitivo” y se ofrece una recompensa de 50 millones de dólares por información que permita su captura. En respuesta, el mandatario venezolano anunció el despliegue de “toda la capacidad miliciana” en su territorio, elevando el tono bélico en una región ya marcada por la migración masiva y el colapso institucional.

Brasil, que alberga a más de un millón de refugiados venezolanos, insiste en que la lucha contra el crimen organizado debe ser cooperativa y no unilateral. Pero el mensaje es claro: no hay reconocimiento, no hay respaldo, y el Caribe se convierte en tablero de ajedrez geopolítico.