En medio de la tensión que crece en el Caribe por el despliegue naval estadounidense cerca de las costas venezolanas, un mensaje de Marco Rubio encendió las alarmas. El secretario de Estado de EE. UU. publicó en su cuenta de X un críptico trino con dos simples emoticones, lo que muchos interpretaron como una indirecta hacia las declaraciones del chavismo, que había calificado la presencia militar de Washington como una “cortina de humo”.
El trasfondo no es menor: Nicolás Maduro ha denunciado que al menos ocho barcos de guerra y más de mil misiles apuntan hacia Venezuela, mientras su gobierno acusa a Estados Unidos de preparar una intervención disfrazada de operativo antinarcóticos. A la par, Diosdado Cabello e Yvan Gil han rechazado las recientes medidas de Washington, incluida la millonaria recompensa por la captura del líder chavista.
Desde el lado estadounidense, Rubio aseguró que sus fuerzas armadas realizaron una operación letal contra una embarcación cargada de drogas que partió desde Venezuela y era operada por un grupo señalado como narcoterrorista. Mientras tanto, Maduro decretó “alerta máxima” en el país, asegurando que Venezuela enfrenta “la amenaza más grande en 100 años” en la región.