El senador anticorrupción, Jota Pe Hernández, será investigado por la Corte por el mismo delito de Álvaro Uribe, «manipulación de testigos».

La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia abrió un nuevo capítulo judicial que compromete al senador Jonathan Ferney Pulido Hernández, conocido como Jota Pe, en un presunto plan de manipulación de testigos para incriminar al exsenador Roy Barreras. El documento, conocido en primicia, revela que el congresista de la Alianza Verde habría ofrecido dinero, contratos e incluso salidas del país a testigos clave para que declararan en contra del exembajador y expresidente del Senado.

El caso se remonta a abril de 2023, cuando Barreras denunció a Jota Pe por calumnia y hostigamiento agravado, tras la publicación de un video titulado “¡Atención! Nueva olla podrida en el Congreso”, en el que se le acusaba de liderar un esquema de corrupción relacionado con el contrato de televisión del Capitolio entre el Senado y la empresa Dicitec S.A.S. Lo que parecía una denuncia política se transformó en una batalla judicial, luego de que tres testigos Kilian Torres, Catherine Torres y John Jairo Uribe declararan ante la Corte que fueron presionados y sobornados por el senador para fabricar testimonios falsos.

La Corte Suprema, que inicialmente archivó la denuncia por falta de pruebas, ahora reabre el expediente tras conocer nuevas evidencias que apuntan a una estrategia de montaje cuidadosamente planificada. El caso pone en jaque la credibilidad de Jota Pe Hernández, quien ha construido su imagen como “senador anticorrupción”, y abre un debate sobre los límites de la denuncia política en tiempos de polarización.