Desde una guarnición militar en Bogotá, el exsubdirector de la UNGRD, Sneyder Pinilla, envió una carta pública en la que denuncia que aún hay responsables del saqueo a la entidad que conservan poder político y no han sido investigados. En el escrito, conocido este 30 de julio, Pinilla exige “garantías reales” para seguir colaborando con la justicia y advierte que su vida corre peligro.
Pinilla reveló que fue objeto de un intento de soborno por 13.000 millones de pesos, ofrecidos por exfuncionarios y abogados vinculados al escándalo, a cambio de su silencio. El episodio fue grabado por su abogado Gustavo Moreno, quien actuó como agente encubierto. Entre los implicados en el intento de soborno figuran Luis Carlos Barreto Gantiva, Pedro Andrés Rodríguez y Édgar Riveros, todos con vínculos directos a la UNGRD.
El exfuncionario, condenado a cinco años y ocho meses de prisión, ya ha devuelto más de 600 millones de pesos como parte de la reparación al Estado. En su carta, insiste en que la justicia no debe centrarse solo en “mandos medios y los más débiles”, sino llegar hasta los máximos responsables del entramado corrupto. “¿Quiénes querían silenciarme? ¿Quiénes pagarían esa millonaria suma?”, cuestiona Pinilla.
Este nuevo pronunciamiento se suma a una serie de revelaciones que han permitido la captura de varios implicados, incluidos dos expresidentes del Congreso. La carta de Pinilla reaviva el debate sobre la profundidad del saqueo en la UNGRD y la necesidad de que el país conozca toda la verdad.