Mientras el mundo se desvive por el último iPhone y la obsesión por la tecnología sigue sin límites, el multimillonario Evangelos Marinakis, dueño del Nottingham Forest, sigue fiel a su viejo iPhone 7 y a sus audífonos con cable, sin preocuparse por tendencias absurdas.
Tiene suficiente dinero para comprar todas las Apple Store del mundo, pero a diferencia de muchos, parece saber en qué gastarlo.
Mientras tanto, “tú sigues pagando cuotas infinitas por un teléfono que te costó la estabilidad financiera”, solo para presumirlo en redes.