En Cereté, Córdoba, una bebé fue registrada oficialmente como Chat Yipiti Bastidas Guerra, un nombre que evoca directamente a la inteligencia artificial y que ya está dando de qué hablar. El registro se hizo el pasado 15 de agosto, y desde entonces, la historia ha recorrido grupos de WhatsApp, emisoras locales y hasta debates sobre crianza moderna. Por primera vez, una niña colombiana lleva en su nombre el sello de la era digital.
La Registraduría Nacional confirmó que el nombre fue aceptado sin objeciones, ya que no vulnera la dignidad del menor. Y aunque en el pasado se han vetado casos como Miperro, Satanás o Warnerbro, otros nombres igual de peculiares han logrado entrar al registro civil: Usnavy (inspirado en la Marina de EE. UU.), Superman, Anivdelarev (por “Aniversario de la Revolución”), Lady Di, John Lennon, y hasta Yudergui, que nació del intento de escribir “You’re the greatest”. Chat Yipiti se suma a esta lista, pero con un ingrediente nuevo: la tecnología como inspiración directa.
Expertos en infancia y cultura popular advierten que los nombres no son solo una ocurrencia creativa: también pueden marcar la vida de una persona. ¿Qué pasará cuando Chat Yipiti entre al colegio, tenga redes sociales o simplemente quiera explicar su nombre en una entrevista de trabajo? Nadie lo sabe, pero lo cierto es que esta niña ya nació con una historia viral bajo el brazo.
Mientras tanto, en las calles de Cereté, muchos se preguntan si esto es creatividad, exageración o simplemente una señal de los tiempos. Lo que sí está claro es que la inteligencia artificial ya no solo escribe textos ni responde preguntas, ahora también bautiza.