«Se me olvidó el inglés por estar ocupado siendo presidente de la República», Gustavo Petro

En su alocución del 3 de septiembre, el presidente Gustavo Petro volvió a encender el debate sobre el inglés en Colombia. “Lo sé leer, no crean, pero se me ha olvidado un poco por estar de presidente de la República”, confesó ante las cámaras, reconociendo que no domina el idioma que rige la diplomacia global. La frase, que ya circula como meme, ha sido interpretada por muchos como una metáfora de otras cosas que “se le han olvidado” en el poder.

Petro ha sido crítico del inglés como idioma oficial en los colegios, argumentando que “somos colombianos, no gringos ni aristócratas ingleses”. Sin embargo, también admitió que le gustaría dar discursos internacionales en inglés, y que sus hijos dominan más lenguas que él. La contradicción ha generado reacciones encontradas: ¿puede un presidente liderar una política exterior efectiva sin hablar el idioma que domina los organismos multilaterales?.

Más allá del meme, el caso revela una falla estructural: Colombia sigue siendo uno de los países con peor nivel de inglés en América Latina. Mientras el presidente relativiza su importancia, miles de jóvenes enfrentan barreras laborales por no dominarlo. ¿Es hora de repensar el enfoque educativo sin caer en el complejo colonial, pero sin negar que el inglés sigue siendo una herramienta de poder?.