Este tipo en qué anda pensando, Petro convocará a conferencia sobre Gaza y pide «hacer frente contra Israel»

En una movida que ha generado reacciones encontradas dentro y fuera del país, el presidente Gustavo Petro anunció que el próximo 15 de julio convocará en Bogotá una conferencia internacional de emergencia sobre la situación en Gaza. El anuncio lo hizo a través de una columna publicada en el diario británico The Guardian, donde aseguró que “gobiernos como el mío tienen el deber de enfrentar a Israel” y que “demasiados han fracasado” en detener lo que calificó como una campaña de devastación liderada por el primer ministro Benjamin Netanyahu.

La conferencia, que contará con el respaldo de Sudáfrica como copresidente del Grupo de La Haya, busca introducir medidas jurídicas, diplomáticas y económicas concretas para frenar la ofensiva israelí en territorio palestino. Petro afirmó que la comunidad internacional no puede seguir en silencio y que es hora de pasar “de la condena a la acción colectiva”. La invitación es abierta, aunque hasta el momento no se ha confirmado la asistencia de ningún país.

El mandatario colombiano también recordó que en septiembre de 2024, Colombia fue uno de los 124 países que votaron a favor de una resolución de la ONU que exigía a Israel poner fin a su presencia en los territorios palestinos ocupados en un plazo de 12 meses. “El tiempo avanza”, advirtió Petro, quien además destacó que su gobierno ya tomó medidas como la suspensión de exportaciones de carbón a Israel. También citó acciones similares de Malasia y Sudáfrica, esta última por llevar a Israel ante la Corte Internacional de Justicia.

Sin embargo, el anuncio ha sido interpretado por algunos sectores como una jugada política arriesgada, especialmente en un momento en que Colombia atraviesa tensiones diplomáticas, carece de canciller en propiedad y enfrenta desafíos internos urgentes. Críticos del gobierno cuestionan si Petro está usando la política exterior como plataforma ideológica, mientras otros lo aplauden por asumir una postura firme frente a lo que considera una violación sistemática del derecho internacional.