En la ciudad de Manizales, se registró un suceso de película. Una mujer expuso a un grupo de policías, quienes, según ella, le pidieron un monto de $150 mil pesos para liberar a su hijo, quien había sido detenido por un hurto realizado.
La mujer, quien se las ingenió en el momento, mientras entregaba el dinero, tomo evidencias del suceso para obtener pruebas claves contra los uniformados. El caso se fue lejos, pues llegó hasta el Juzgado Quinto Penal Municipal, donde la Fiscalía le imputó el delito de concusión a los agentes por exigir dinero de manera indebida.
Ahora, el proceso está en manos del Tribunal Superior de Manizales, que deberá determinar la pertinencia de los testigos antes de dar paso al juicio.