Un fuerte enfrentamiento entre un taxista y un conductor de servicio informal desató el caos en la entrada principal del Terminal de Transporte de Ibagué el pasado martes 25 de marzo.
Armados con palos y correas, ambos se enfrascaron en una violenta pelea que generó alarma entre los presentes.
Antonio Blanco, líder del gremio de taxistas, atribuyó el altercado a la falta de control sobre el transporte irregular y criticó la ausencia de agentes de tránsito en la zona.
Aunque juzgó la agresión, advirtió que la competencia desleal está afectando gravemente a los conductores formales.
El episodio ha reavivado el debate sobre la regulación del transporte informal y la necesidad de mayor presencia de las autoridades para evitar que este tipo de conflictos sigan ocurriendo.