Brayan Camilo Torres, un joven lleno de sueños y determinación, se ha convertido en protagonista de una inspiradora historia de perseverancia. Con el anhelo de ser piloto de avión comercial, Torres enfrentó significativas dificultades económicas. Sin embargo, con la ayudade sus seres queridos, encontró en la venta de tamales la manera de financiar su educación.
Aunque al principio parecía imposible cubrir los altos costos de la carrera solo con la venta de tamales, Brayan y su familia se aferraron a la fe y al trabajo honrado. Gracias a sus esfuerzos, lograron acceder a un crédito que pagaron con la venta de sus deliciosos tamales.
Después de años de dedicación y preparación, Brayan Camilo realizó su primer vuelo en la ruta Barranquilla-Neiva, aterrizando sin contratiempos en el aeropuerto Benito Salas.
Aunque fue un duro camino para llegar hasta donde está ahora, su sueño continúa y espera convertirse próximamente en piloto internacional.