El encantador estilo de animación del Estudio Ghibli ha cautivado a millones de seguidores en todo el mundo, inspirando a muchos a recrear sus imágenes con ayuda de herramientas de inteligencia artificial. Sin embargo, este uso ha levantado preocupaciones relacionadas con la privacidad y la seguridad digital, ya que las imágenes generadas y los datos subidos pueden ser vulnerables a ataques de información en la web.
Mientras que algunos celebran la posibilidad de emular el arte único de Ghibli, otros critican el posible abuso de la propiedad intelectual del estudio por parte de estas plataformas. Además, expertos han advertido sobre el uso de datos biométricos en herramientas de IA, que se recopilan de manera gratuita sin que los usuarios consideren las implicaciones de seguridad. Mónica Vargas, máster en Inteligencia Artificial, señaló: “Cuando se usan estas herramientas sin costo, los datos del usuario se convierten en el producto, lo que facilita su venta para publicidad y otros fines comerciales”.
El debate pone de relieve los riesgos asociados con la inteligencia artificial, especialmente en temas de protección de datos. Aunque la tecnología promete facilitar la creatividad, su uso debe acompañarse de conciencia sobre los posibles peligros de exponer información personal en la red.