El reciente pronunciamiento del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, que confirmó la victoria de Nicolás Maduro, ha generado una ola de rechazo por parte de varios gobiernos latinoamericanos. En un comunicado conjunto, once países expresaron su categórico NO al anuncio del TSJ.
El comunicado, firmado por Argentina, Costa Rica, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, manifiesta dudas sobre la validez del proceso electoral.
Los países firmantes señalaron que ya habían expresado su desconocimiento de la declaración del Consejo Nacional Electoral (CNE), debido a la falta de acceso de los representantes de la oposición al conteo oficial, la no publicación de las actas y la negativa a realizar una auditoría imparcial e independiente.
Además, recordaron el pronunciamiento de la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos, que alertó sobre la falta de independencia e imparcialidad tanto del CNE como del TSJ.
“Los países que suscriben, reiteran que solo una auditoría imparcial e independiente de los votos, que evalúe todas las actas, permitirá garantizar el respeto a la voluntad popular soberana y la democracia en Venezuela”, añade el comunicado.